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Diakonia fortalece el trabajo humanitario

7 mayo, 2021

Diakonia inicia una nueva colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, (FAO) y nuestra socia, la Asociación de Organismos No Gubernamentales, (ASONOG), para fortalecer el trabajo humanitario en el Honduras.

La acción conjunta pretende contribuir a reducir la desnutrición en cinco pueblos indígenas Tolupanes en la Montaña de la Flor en Honduras, particularmente en los niños y niñas menores de cinco años que según un Estudio del Observatorio de Seguridad alimentaria y nutricional (OBSAN) de la Universidad Nacional los infantes menores de 5% años en esas comunidades presentan un 56.7% de desnutrición crónica.

En el territorio indígena a intervenir con esta acción humanitaria y de soberanía alimentaria la esperanza de vida es de 36 años para las mujeres y 43 años para los hombres, muy por debajo de los promedios nacionales que son de 72.47 años para mujeres y 69.03 para hombres.

Mejora las condiciones alimentarias

El proyecto pretende mejorar las condiciones alimentarias de 200 familias tolupanes a través de la ayuda alimentaria y implementación de huertos familiares y comunitarios, apoyo a la producción sosteniblemente y de forma saludable, así como el conocimiento de sus derechos; tanto alimentarios como los derechos humanos de mujeres y niños y niñas.

Las actividades del proyecto se centran en tres resultados:

-El primero está orientado en apoyar a las familias proveyéndoles alimentos e insumos de higiene para mejorar las condiciones precarias que tienen la población en estas comunidades; se espera que esta ayuda contribuya a mejorar las necesidades de alimentación necesarias en este momento y que brinden condiciones mínimas para que las familias puedan involucrarse en las otras actividades de reconstrucción de sus medios de vida.

-El segundo resultado está orientado a la implementación de huertos familiares y comunitarios; se espera que estos huertos se establezcan en terrenos familiares y comunitarios de entre 1 y 2 tareas y que sirvan como espacios para la producción de alimentos variados y saludables, pero también como espacios pedagógicos, ya que ahí se desarrollarán las capacitaciones con metodologías como de campesino a campesino o el machete verde; se proporcionará todos los materiales e insumos para garantizar la producción de los huertos pero también la sostenibilidad y replica de las acciones en los patios familiares. Cada huerto familiar incluirá un sistema de micro riego, para asegurar la producción.

-Y el tercer resultado está orientado a la mejora de capacidades de la población en temas como nutrición, producción saludable y sostenible y derechos humanos de las mujeres y las y los niños. Los dos últimos resultados se desarrollarán metodológicamente de forma simultánea, aprovechando los espacios productivos, la parcela colectiva, para el desarrollo de las capacitaciones técnicas, de manera teórica y aplicada